La Dirección General de Bosque de la Provincia, se encuentra llevando a cabo un relevamiento en la vera de la ruta J que nace en el paraje Rancho Hambre donde se registran numerosos asentamientos irregulares. Allí se procedió a la incautación de un cargamento completo de madera cortada ilegalmente en esos bosques nativos de jurisdicción provincial. En los últimos años y particularmente en los últimos meses, la vera de la "Ruta Complementaria J" se ha tornado intransitable por la presencia de tranqueras, alambrados y carteles diseminados sobre este territorio fiscal que sin escrúpulo advierten "Prohibido Pasar – Propiedad privada". Ante esta situación, la Dirección General de Bosque, con el apoyo de la Policía y el área de Tierras Fiscales, estan llevando a cabo un relevamiento. Según lo adelantado, el operativo –de carácter espontáneo– abarcará unos cuarenta y cuatro sectores ocupados, que no acreditan ningún permiso de permanencia. En este contexto, se evaluarán el impacto ambiental en los terrenos, labrarán las actas y verificaciones correspondientes. Simultáneamente, el área de tierras provincial se encuentra notificando desalojos, a quienes no poseen permiso de ocupación. Por otra parte, se pudo constatar que varios de los habitantes de la zona estarían organizándose para conformar una Junta vecinal, con el fin de comenzar a reclamar al Gobierno Provincial, la tenencia de la tierra o el permiso de uso.
El secretario de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Provincia, Nicolás Lucas, señaló desde esa área gubernamental "hemos activado un operativo incautación de madera, para identificar las cortes ilegales en la Ruta J, y proceder a su decomiso, porque son bosques fiscales y no existen ninguna autorización concedida para cortar bosque en ese lugar", lo que significa "es una infracción al régimen forestal vigente".
El funcionario reconoció que "se trata de un delito penal", por lo cual "iniciamos las actuaciones administrativas pertinentes –porque lo primero que hay que hacer verificar y constatar los hechos– eventualmente identificar a los responsables y llegado el caso se da intervención a la Justicia".
Respecto a al material incautado, precisó que "no sabemos si es para comercializar, para construir las propias casillas que se están instalado", o bien "si es para despejar espacios para instalar casas, aunque es probable que estas situaciones se combinen", dijo.
El escenario
La Ruta J nace en el paraje Rancho Hambre, a unos 45 kilómetros de Ushuaia. Con más 100 kilómetros de extensión, el tramo es el paso obligado para el acceso terrestre a Puerto Almanza, Moat y Estancia Harberton.
Este camino de jurisdicción nacional, goza de un marco natural privilegiado, con paisajes fundidos por un tupido bosque nativo, turbales, arroyos y lagunas. Lamentablemente en la actualidad la zona se encuentra amenazada por la presencia de ocupaciones ilegales. En el presente, sin dudas, el sector más poblado se encuentra en el tramo que une el kilómetro 3 y la Laguna Victoria, de donde se puede apreciar desde el camino una gran cantidad de granjas.
En el lugar se observa también la proliferación de casillas de escasas dimensiones; que dejan ver casi como una reproducción de la típicas viviendas ubicadas en varios asentamientos de la capital fueguina, con fines especulativos. A la vista de todos queda el inminente riego ambiental que estas edificaciones significan, ante la posibilidad de que en algún momento se produzca un incendio.
En ese sentido Nicolás Lucas adujo que "es una situación realmente preocupante y es parte de este desorden producido en la ocupación del territorio, que no es exclusivo en la Ruta J sino que es evidente en muchos lugares" y enfatizó: "no es tarde para recuperar la belleza de este lugar, porque sigue siendo un lugar privilegiado, que debemos conservar".
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